Una pincelada sobre el vínculo seguro

Son varios los autores que han investigado la necesidad de un vínculo seguro, entre padres e hijos, para el desarrollo físico, emocional saludable de los menores, así como su red social. Un bebé que se siente «visto» es un bebé que siente su contexto como seguro, siente el amor incondicional de sus cuidadores, esto le permite explorar y crecer de forma sana.

Este vínculo se debe comenzar a cuidar desde el embarazo. Es muy importante que la madre se cuide y se siente cuidada durante el embarazo, tanto a nivel físico como emocional, ya que puede repercutir sobre el estado y desarrollo del bebé. En el momento del parto varias hormonas ponen en predisposición a madre e hijo para poder «engancharse» a ese vínculo. Las dos horas posteriores al parto el bebé se encontrará en alerta, lo que se conoce como periodo sensitivo. Durante este tiempo será el sentido del olfato el que se encontrará más activo. El bebé podrá reconocer el olor corporal de la madre, especialmente de aureola del pezón, lo que facilitará el contacto visual, el enganche al pecho y la calma del bebé en contacto piel con piel.

Pero esto no se queda aquí el bebé tendrá que desarrollar un buen vínculo con el resto de cuidadores, así como todos los cuidadores continuar fomentando este vínculo seguro para el sano desarrollo del bebé.

En el Centro de Psicología Noguerol llevamos 25 años realizando asesoramiento y talleres para padres destinados a conocer, mejorar y potenciar el vínculo entre padres e hijos.